En un determinado momento cuando pretendía sacar los electrodoméstico, la joven se negó y fue cuando el violento comenzó a insultarla; luego la tomó del cuello con ambas manos para hacerle golpear la cabeza contra un ropero.
El llanto de la pequeña, que se encontraba en medio del ataque, logró que el acusado cesara con los golpes de puño que le estaba propinando. Según contó la víctima, su ex tomó a la niña en sus brazos y se la llevó, pese a sus esfuerzos por evitarlo.
Más tarde la madre de acusado —suegra de la víctima— se presentó en la policía y entregó a su nieta expresando que su hijo la había dejado en su casa desconociendo que éste había golpeado a su ex nuera.
La Dra. María del Pilar Gallo —fiscal de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar— solicitó que la joven sea examinada por el médico de Sanidad y que la policía busque al violento y lo ponga tras las rejas.